Fardelejos Miguel Solana - Los Fardelejos de ArnedoNo os recomendamos que invirtáis el tiempo en preparar fardelejos en casa, sabiendo que los nuestros, de Miguel Solana, son prácticamente insuperables. Pero no nos importa que lo intentes y aquí tienes algunas buenas maneras de prepaparlos. Al final estamos seguros que terminarás hacindo tu pedido online a través de nuestra página Web:

RECETA 1

  1. En un cazo ponemos a calentar el agua, la manteca y la sal.
  2. Cuando la grasa se haya derretido sin llegar a hervir, se añade la harina poco a poco amasando como si fuera un pan, teniendo en cuenta que cuanta mas trabajamos la masa más hueco saldrá el hojaldre.
  3. Y aquí va un truquito que me va de maravilla: y es que la masa hay que meterla en una bolsa de utilidad comestible para que no se enfríe. Hacemos el relleno de la siguiente manera:
  4. En un bol batimos los huevos con el azúcar y la ralladura del limón, después añadimos almendra molida. Mezclamos todo bien y reservamos.
  5. Espolvoreamos la mesa de trabajo con un puñado de harina, acto seguido tomamos porciones de masa que estiramos con el rodillo hasta que quede muy fina. Entonces colocamos en el centro del hojaldre una cucharada del relleno, doblamos la masa y ayudados de la ruleta cortamos los fardelejos procurando que sean de 4 x 6 cm. Apretamos los bordes con las yemas de los dedos o con las puntas de un tenedor y los freímos en abundante aceite hasta que adquieran un bonito color avellana.
  6. Se escurren sobre servilletas de papel y cuando están fríos se espolvorean con azúcar glasé.

Obtenida desde Canal Cocina.

RECETA 2

  1. Preparar en primer lugar el relleno, batiendo en un cuenco amplio los huevos con el azúcar hasta que presenten una apariencia blanquecina; añadir la almendra, mezclar todo muy bien y reservar.
  2. Medir la manteca diluida al calor –sobre fuego muy suave o en el microondas- y, mezclada con el mismo volumen de agua tibia y la sal, calentar sobre fuego muy suave hasta que empiece a humear.
  3. Sin dejar de remover con una paleta o un cucharón no metálicos, ir agregando lentamente la harina, para, una vez obtenida una mezcla homogénea y suave, retirar el recipiente –cuyo contenido nunca tiene que llegar a hervir- del calor, y verter sobre una superficie de trabajo no porosa (mármol o encimera de los nuevos materiales), y con las manos formar una bola con la masa.
  4. Estirar la masa con un rodillo hasta obtener una lámina muy fina (inferior a medio centímetro) y cortarla en rectángulos de 15 x 20 cm.
  5. Distribuir sobre estos rectángulos sendas porciones de la mezcla de almendras; cerrar bien sobre el relleno los bordes de masa, presionándolos con las yemas de los dedos o con las púas de un tenedor humedecidos en aceite, y freír por tandas los fardelejos en una sartén profunda con el aceite de oliva caliente hasta que estén dorados por ambas caras.
  6. Depositar los fardelejos, muy escurridos, a una fuente forrada con papel absorbente de cocina, antes de disponerlos sobre la que se llevará a la mesa, ya templados, recién espolvoreados de azúcar molido.

Receta obtenida de LogroñoTurismo.org